domingo, 20 de enero de 2019

Control emocional, clave del éxito profesional



Son muchas las ocasiones que a mis alumnos les transmito que el autocontrol en la vida es muy importante para tener éxito.


De forma instintiva, el ser humano actúa por impulsos, ante situaciones donde en lugar de reflexionar pasan a la acción, por lo que actúa sin reflexión, sin prudencia, y se deja llevar por la impresión del momento.

Por ello, fomentar la habilidad de un correcto autocontrol, junto con la autodisciplina, la perseverancia y la constancia desde la infancia, va a determinar cómo seremos en un futuro. Es muy importante controlar las emociones.

Esta falta de autocontrol supone un desafío en el día a día, desde el núcleo familiar, ocasionando problemas de convivencia en casa, en el colegio, en la relación con los profesores, e incluso entre los propios adolescentes, provocando una falta de habilidades sociales que pueden llegar a aislar a la persona si no se actúa a tiempo y se corrige.

En el aula, trabajamos con adolescentes, y en ocasiones cuando el docente intenta imponer su autoridad elevando la voz, estamos cayendo en el error de transmitir a los alumnos falta de autocontrol, y no damos ejemplo. Como padres ocurre algo similar. Y debemos evitarlo.

Es la llamada “técnica del volumen fijo”. El objetivo de esta técnica es que en el momento en que la persona se de cuenta de que el adolescente esté subiendo el volumen de voz, lo baje y se quede en un volumen normal. Si éste continúa subiendo el volumen, no importa, deberá seguir manteniendo el suyo. Cuando el adolescente se dé cuenta de que el tono de voz es constante y mantiene volumen fijo, bajará la voz.
Por ello, tener una actitud positiva, un aplomo, transmitir seguridad y control en el aula son fundamentales para transmitir respeto y cercanía, lejos de la idea de transmitir miedo, temor o castigo.

El autocontrol emocional, es la clave del éxito profesional.