sábado, 31 de enero de 2015

Éxito o fracaso escolar.




Muchos padres me preguntan si sus hijos serán capaces de tener éxito en su formación académica en estos años de adolescencia un tanto complicados. Bajo mi punto de vista son dos los principales factores que dependen del éxito o fracaso escolar de un alumno.

El primer factor, es la capacidad que su hijo tenga de entender, comprender, analizar y poner en práctica los conocimientos de la forma más autónoma o independiente posible. Este factor depende de la propia naturaleza de la persona, desde pequeños podemos observar si nuestro hijo es capaz de comprender y aprender ideas o conceptos que intentamos explicarles o simplemente mostrarle con ejemplos. En el colegio ocurre lo mismo. Desde edades en la etapa de la enseñanza primaria, y sobre todo, en la etapa de secundaria podemos observar si el alumno tiene una buena capacidad de comprensión. Si esto es así, es probable que tenga éxito escolar en el futuro. 

Pero el segundo factor, más importante que el primero, es la disposición que tiene el alumno  de realizar un esfuerzo y sacrificio para aprender a estudiar desde edades más tempranas. Esto es la aptitud de que el propio alumno pueda desarrollar un hábito de estudio y que lo vea de forma natural.

Si somos capaces, los padres, de inculcar este hábito diario, y de reconocer el esfuerzo de nuestros hijos, el éxito estará asegurado. Sin embargo, también el trabajo de los profesores y maestros desde las escuelas y colegios es fundamental. Nuestra labor no solo es la de transmitir conocimientos, formarlos como personas,  enseñarles unos buenos hábitos de actitud y comportamiento, sino también la de motivarlos para que desde pequeños entiendan que el esfuerzo merece la pena.